Aporta vitaminas E y F y además contiene los filtros solares necesarios para garantizar una piel resistente frente a los efectos nocivos de la radiación solar.

Deja sobre la piel un tacto seco y agradable, favoreciendo la obtención de un bronceado seguro.

Importante:

El grado de protección frente a las rayos UVB, (no a los UVA ni otro tipo de radiación solar), conocido como FPS (factor de protección solar), también llamado SPF (del inglés, Sun Protection Factor) o también llamado IPS (índice de protección solar); es la capacidad que tiene el producto para filtrar el paso de los rayos solares.

El grado de FPS nos indica el número de veces que el fotoprotector aumenta la capacidad de defensa natural de la piel frente al eritema (enrojecimiento).

Cada piel necesita un tipo de protección. Según los científicos, se ha estimado, que el tiempo de protección natural promedio de las distintas pieles es de 10 minutos, por lo que un FPS de 50 protegerá nuestra piel 50 x 10 minutos = 500 minutos, que son 8 horas. Es decir, con una aplicación, sin sumergirnos en agua, de FPS 50 estamos protegidos casi 8 horas.

La protección no será igual de duradera si nos bañamos o si existe sudoración excesiva, por ello se recomienda aplicar el producto más veces en estos casos o parecidos.

¡Son tanto o más importante otros medios de protección como los sombreros, sombrillas, camisetas y evitar las horas puntas del sol!

Hay que cuidar la piel en las primeras exposiciones al sol. Los rayos UVA y UVB son muy dañinos y una piel que se quema no es una piel sana y no son buenas las larga exposiciones al sol entre las 12:00 horas y 16:00 horas.

El color rojo en la piel o eritema solar está fundamentalmente causado por los UVB (aunque también en parte por los UVA), por lo que el SPF mide fundamentalmente la protección frente a éstos. Se ha achacado el cáncer de piel al UVB (aunque se sabe que el UVA es igualmente dañino

Grados de Protección:

a)    Muy alta:  50+

b)    Alta: 30-50

c)     Media: 15-25

d)    Baja: 6-10

Aplica cantidad suficiente

Todo esto, por supuesto, con un adecuado cumplimiento (aplicar 2mg/cm2 y reaplicar cada 2-3 horas).

En un adulto de constitución media esto equivaldría a 6 cucharadas de postre o un vaso de chupito.

El protector solar no lo es todo

La crema solar un complemento a otras medidas para protegernos de los rayos UV

Factor de protección solar: cuanto más alto mejor

Cualquier grado de exposición solar aumenta en menor o mayor medida el riesgo de cáncer de piel.

Un melanoma, no es ninguna broma, y por ello, lo mejor es prevenir cuando aún estamos a tiempo.

La mayoría de nosotros no cumplimos a rajatabla las cantidades y frecuencias de aplicación, por lo que, teniendo esto en cuenta, los dermatólogos generalmente recomiendan un FPS 50+.

No apliques fotoprotector a los bebés menores de 6 meses

Antes de los 6 meses los bebés aún tienen una piel inmadura. Las cremas de protección solar contienen productos químicos (los propios filtros solares lo son) que podrían atravesarla y llegar a la sangre de los bebés.

Fuente: https://dermatologia-bagazgoitia.com/